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El calentamiento global es un fenómeno que consiste en el aumento de las temperaturas en la Tierra, los océanos y la atmósfera. Un incremento producto de la emisión de gases de efecto invernadero por la acción humana. Hoy vamos a conocer algunos de los hábitos diarios que puedes llevar a cabo para contribuir a evitar el calentamiento global.

El calentamiento global es un proceso que, en realidad, ha existido desde siempre. Sin embargo, es en las últimas décadas, con la quema de combustibles fósiles y los cambios en el uso del suelo, cuando se ha incrementado notablemente. Hemos llegado a un punto en el que se ha convertido en uno de los problemas más graves de la civilización humana.

10 hábitos diarios para evitar el calentamiento global

Hay diversos hábitos muy sencillos de realizar con los que puedes ayudar a frenar las emisiones de gases de efecto invernadero. El reciclaje, el ahorro de agua o la eficiencia energética tal vez sean los más importantes y conocidos. Sin embargo, hay algunos más que deberías tener en cuenta.

El reciclaje

Cuando reciclas en casa los residuos, estás ayudando a evitar la emisión de gases de efecto invernadero, los principales causantes del calentamiento global. Se estima que, cada año, se ahorran en todo el mundo gracias al reciclaje 700 millones de toneladas de CO2, el gas más peligroso para el medio ambiente.

Utilizar productos biodegradables

Muy relacionado con el proceso de reciclaje es el uso de productos biodegradables para contribuir al cuidado del medio ambiente. Estos productos son fáciles de reciclar, consumen menos energía para su fabricación, reducen los niveles de dióxido de carbono en la atmósfera y disminuyen la emisión de gases de efecto invernadero.

Ahorro de agua

Cambiar la forma en la que usas el agua te permitirá evitar el calentamiento global. Por ejemplo, al usar menos el agua caliente se reducen las emisiones de gases de efecto invernadero, ya que la necesidad de energía para calentar el agua será menor. Además, por cada 1.000 litros de agua que gastas se emiten 10 kilos de CO2 a la atmósfera.

Eficiencia energética

El mal uso de la energía en el hogar y en las empresas es responsable de dos terceras partes de las emisiones de gases de efecto invernadero a escala mundial. Quiere esto decir que optando por un uso más eficiente de la energía se logrará reducir la emisión de estos gases y evitar el calentamiento global.

Comprar electrodomésticos eficientes

El uso de electrodomésticos de alta eficiencia energética es un paso importante para frenar el calentamiento global. El sector de los electrodomésticos consume un cuarto de la electricidad de todos los edificios. Apostar por aparatos que consuman menos energía y apagarlos cuando no los estés usando te ayudará incluso a ahorrar dinero.

Cambiar las bombillas halógenas por bombillas LED

Y ya que hablamos de eficiencia energética para evitar el calentamiento global, nada mejor que sustituir las bombillas halógenas de casa por unas bombillas LED. Con este nuevo sistema se reduce la emisión de CO2 a la atmósfera, ya que toda la energía que llega a la bombilla se usa para dar luz y no para emitir calor.

Consumir productos ecológicos

El sector de la alimentación es uno de los que produce más gases de efecto invernadero. Una de las mejores decisiones que puedes tomar para contribuir a frenar este problema es pasarte a los productos ecológicos. La agricultura ecológica posibilita una reducción media de hasta el 10% en aquellos factores que afectan al incremento del calentamiento global.

La economía circular

Darle una segunda vida a las cosas es un hábito que puedes llevar a cabo para contribuir con el medio ambiente. Hay productos, artículos y/o aparatos que no utilizas en casa y que, muy probablemente, le valgan a otra persona. Recicla, dona o pon a la venta esos productos para fomentar la economía circular.

Usar menos el coche

Los coches y otros vehículos emiten un 12% del total del dióxido de carbono (CO2) a la atmósfera. En la medida de lo posible, trata de usar menos el coche para algunos desplazamientos cortos. Andar, utilizar el transporte público o ir en bicicleta son algunas de las alternativas que tienes a tu alcance para ayudar a evitar el calentamiento global.

Tener plantas en casa

Los árboles y plantas son capaces de capturar el CO2 del ambiente y almacenarlo por mucho tiempo. Si no tienes la posibilidad de tener árboles en casa, nada mejor que poner plantas. Plantas como el potos, la palmera china o de bambú o el ficus son ideales para purificar el aire del hogar y reducir los efectos del dióxido de carbono.