El reciclaje de madera es un proceso muy sencillo e importante a la vez. Un proceso en el que, por ejemplo, no hay que emplear ningún tipo de materiales químicos. Al reciclar este material, se consigue que la demanda disminuya. Pero, ¿sabes cómo se hace el reciclaje de madera y dónde tirarla?
En Gadis venimos apostando desde hace muchos años por el reciclaje de residuos. El pasado año 2021 reciclamos más de 0,25 millones de kilos de madera. Una cifra sensiblemente superior a la del 2020 y que se suma a los más de 9,5 millones de kilos de plástico, cartón y otros residuos que hemos reciclado en 2021 en todos nuestros establecimientos.
¿Dónde tirar la madera usada?
Es probable que muchas personas se pregunten dónde tirar la madera usada para poderla reciclar. Muy sencillo. Si se trata de cajas de frutas o madera pequeña, esta irá al contenedor amarillo. En cambio, si hablamos de objetos de madera que sean más grandes, como por ejemplo los muebles, habrá que depositarlos en un punto limpio. De esta forma, estos objetos grandes no obstaculizan la vía pública.
¿Cómo se hace el reciclaje de madera?
Pero cómo se hace el reciclaje de madera. El proceso, curiosamente, es uno de los más sencillos en lo que a reciclaje de residuos se refiere. Además, es un proceso muy económico y sostenible con el medio ambiente.
Tan solo habrá que separar los residuos en la planta de reciclaje y, por último, triturar en viruta o serrín para convertir luego el resultado en aglomerado, compost y similares.
Primero, en una planta se separa del resto del reciclado
El camión que transporta la madera llega a la planta de reciclaje. Una vez aquí, se lleva a cabo un proceso de control en el que se separa del resto del reciclado.
Generalmente, la madera suele ir mezclada con otros residuos, tales como plástico, cartón, metales, etc. Una vez separada, se determina su peso y su calidad antes de pasar al siguiente paso.
Luego, se tritura en viruta o serrín y se convierte en aglomerado, compost y similares
A continuación, se pasa a triturar la madera previamente seleccionada hasta convertirla en viruta o serrín. De esta forma, se consigue un producto uniforme y más limpio que se puede manipular más fácilmente.
Por último, la viruta o serrín se puede emplear en múltiples aplicaciones. Una de ellas es la fabricación de aglomerado, paneles formados por virutas o partículas encoladas con resinas sintéticas. Otra de las aplicaciones es convertir la madera reciclada en compost y similares para uso ganadero.
Este es el proceso que se lleva a cabo para el reciclaje de madera. Hay que tirarla en los contenedores amarillos (si es pequeña) o en el punto limpio (piezas más grandes). Una vez llevada a la planta de reciclaje, se separa del resto del reciclado y se tritura hasta convertirla en viruta o serrín. Un proceso de reciclado muy sencillo, pero de enorme importancia para el cuidado del medio ambiente.
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